El ingrediente principal de cualquier confitura o mermelada de naranja es evidentemente la
naranja, un fruto dulce que procede del naranjo, árbol del grupo de los Citrus de la familia de las
Rutáceas.
Es un fruto con alto contenido en vitamina C y ácido cítrico que proviene del
Asia tropical y subtropical. Podemos distinguir dos variedades, el naranjo dulce (Citrus
sinensis) y el naranjo amargo (Citrus aurantium).
Este último es usado principalmente para crear esencias, aromas y fragancias,
así como con fines decorativos.
La flor de este árbol, el azahar, es tan bien muy apreciada a la hora de
fabricar perfumes y aromas.
Las propiedades de este fruto son inagotables, rico en vitaminas y minerales,
fibra y un escaso valor calórico.
Es una fruta que se puede disfrutar todo el año gracias a las diferentes
variedades del producto. Es un árbol que florece en primavera, y su maduración se produce a
mediados de otoño abarcando hasta principios de verano.
Elaborar una deliciosa
mermelada de naranja
casera es relativamente fácil y aunque tradicionalmente la usamos en el desayuno con tostadas, es
de destacar que es un acompañamiento ideal en carnes (cerdo, caza, aves...) y patés así como en la
decoración de pasteles, tartas y chocolates.
Receta casera de mermelada de naranja
Ingredientes:
- Tres naranjas.
- El zumo de un limón.
- 600 gramos de azúcar.
Elaboración de la mermelada:
Lavar minuciosamente las naranjas y pelarlas retirando toda la parte blanca, ya
que eso amargaría la mermelada de naranja resultante.
Trocear la pulpa y retirar los huesos, si los hubiera. Cortar la piel en tiras
muy finas y colocar en una cacerola la pulpa y la piel y cocer a fuego lento unos 30 minutos,
removiendo de vez en cuando para evitar que se pegue.
Una vez pasado ese tiempo añadir el azúcar y el zumo del limón y volver a poner
al fuego otros 15 minutos más. Dejar enfriar y ya estará lista la mermelada de naranja para su
consumo o para envasarla.
Es de destacar que la mermelada espesa a medida que se enfría. |